Después de una semana difícil en el trabajo, la universidad o hasta en la casa, puede que un nuevo lunes no te llene de mucha esperanza. Inicia con pie derecho,porque de ello depende lo productivo que serás en los días a venir.
Establece una rutina
Es bueno iniciar dictando una actividad que te comprometes a hacer temprano todos los días siguientes, esto puede ser: leer un capítulo de un libro que aún no has empezado, correr, ir al gimnasio y hasta tomarse un café mientras escuchas tu música favorita antes de iniciar el día.
Todo esto de seguro te llenará de energía y ayudará a distraerte de tantos quehaceres.
Ordena lo desordenado
Todos tenemos esa esquina de la casa que nunca está arreglada y que siempre decimos “lo haré cuando pueda organizar mi tiempo”. Dedícate a eso, ya sea reacomodar los muebles, limpiar tu cuarto, carro o hasta organizar tu correo.
Emprende un reto
Tu semana coge más importancia cuando tienes una meta por cumplir. Puedes fijar una nueva para cada día, como empezar una dieta balanceada y tratar de conocer nuevas personas. También puedes fijar una meta que cumplirás a largo plazo, ya sea empezar a aprender un nuevo idioma, tomar clases de guitarra y establecer una nueva actividad física semanal.
Realiza un buen acto
Puede venir de muchas formas, yo en lo personal trataría de ayudar a algún amigo que sé que está pasando por un mal momento. También puedes hacer algo por ayudar a tu comunidad, donar ropa que ya no usas o una buena opción sería sembrar un árbol.
Ayudar a otros trae felicidad a tu vida y una sensación de satisfacción que será buena vibra al empezar tu semana.
Atrévete a inspirarte
Lee una buena revista, mira videos de superación personal o artículos que alimenten tus ganas de mejorar como persona cada día. Pequeñas cosas como estas impulsan tus deseos de cumplir tus logros a medida que pasa la semana.
Ya sabes cómo empezar mañana de la mejor manera. ¿Inspirado en proponerte nuevos retos? Descubre la manera, al vivir